Especialmente en verano, la época de las barbacoas, apetece tomarse una cervecita con los amigos y asar algo; sacar tu barbacoa para preparar deliciosos platos. Ya sea carne, pescado o verduras, hacerlas en la barbacoa es algo que es parte de la temporada. Pero si no quieres comprar una barbacoa cada año, en esta guía te enseñaremos a construir una que dure para siempre.
Necesitas:
- Ladrillos.
- Cemento.
- Rejilla para cocinar.
- Placa de metal para el carbón.
También puedes construir dos compartimentos distintos para la rejilla. En nuestro ejemplo, construimos una barbacoa con suficiente espacio para dos rejillas para cocinar. Así, podrás organizar enormes fiestas de cumpleaños sin ningún problema. En primer lugar, has de tomar medidas para comprobar que la rejilla y la placa de metal para el carbón caben en el lugar donde vas a construirla para que puedas colocarlas más adelante sin problema.
Consejo: si no sabes bien cómo hacer los cimientos, aquí tienes una guía en detalle.
Y ya es hora de ponerse a trabajar. Mezcla el cemento como explica el paquete y empieza a colocar varias filas de ladrillos. La primera fila debería formar una gran “E”.
Una vez que tu barbacoa te llegue a la cadera, es hora de construir la sujeción de la placa de metal. Esto es muy simple: coloca y presiona 2 ladrillos contra la cara interna de la barbacoa para que sobresalgan.
Consejo: A lo que hay que prestar atención aquí es la altura a la que estarán al final el fuego y la rejilla. Te recomendamos que coloques la rejilla a la altura de tu ombligo. Si eso son unas 10 filas de ladrillos, el plato de metal estaría en la fila 7 y la rejilla en la 9.
A continuación, coloca una nueva capa de cemento y, de nuevo, pon ladrillos boca abajo en la parte de arriba. Y, finalmente, la última capa de ladrillos arriba del todo. Mídelo todo con un nivelador para asegurarte de que nada queda desnivelado.
Una vez que la barbacoa esté terminada, solo queda colocar la placa de metal y la rejilla para cocinar. Estas simplemente se meten deslizándolas.
Ahora solo has de dejar que se seque el cemento y listo. Ya tienes tu propia barbacoa en el patio…para siempre. Y es fácil de limpiar, porque solo has de limpiar la rejilla y la placa de metal, y luego simplemente volver a meterlas. 
Aquí te dejamos un video de guía para el paso a paso:
Fuente: nolocreo