Como imaginarás, en Hong Kong no sobra precisamente espacio para vivir. Con una población de 6.690 personas por km² (datos de 2014), la ciudad tiene uno de los mercados de vivienda más competitivos que puedas imaginar.
Y cuando surgen este tipo de problemas, las mentes brillantes empiezan a funcionar. El arquitecto James Law ha diseñado un nuevo concepto de vivienda que podría solucionar algunos de los problemas de espacio que existen en la ciudad, además de abaratar el coste de los apartamentos.
Se trata de casas de hasta 100 m² de espacio habitable creadas con tuberías de hormigón de 2’5 metros de diámetro. Las más pequeñas están diseñadas para que vivan una o dos personas, y vienen equipadas con las necesidades más básicas: un salón con sofá cama, una mininevera, un baño con ducha y espacio de almacenaje para ropa y otros objetos.
Las viviendas, llamadas OPod, son fáciles de crear e instalar, se pueden apilar creando edificios y reducen los costes de montaje considerablemente en relación a la construcción tradicional.
La configuración de las viviendas puede crearse dejando espacios para áreas comunes, aparcamientos, o zonas de descanso, y se unen entre ellas con estructuras metálicas, a su vez, más baratas que las de obra. También pueden servir para rellenar fácilmente los huecos entre edificios donde no se puede construir de forma tradicional.
Aunque aún son un prototipo, el South China Morning Post afirma que, si el proyecto sale adelante, cada OPod tendrá un precio de unos 12.300€. Por ese precio, ¿vivirías en una tubería gigante?
Esta es la estructura más bizarra pero genial en donde nosotros quisiéramos vivir.