Para realizar uno de estos increíbles hornos de leña para el jardín, no se debe ser un experto en albañilería, solo considera que se debe seguir todas las intrucciones y en el caso de hoy veremos cómo un usuario en la red hizo este horno y agradecemos el haber publicado su trabajo y las imágenes que el tómo muestran cada paso que hizo para construir su horno desde la base hasta la colocación de la puerta. Todo comenzó con la intención de tener una zona de parrillas en su jardín pero con un horno para el invierno hacer pan y pizza. El usuario comenta que buscando información de hornos en Internet, y consultando a los albañiles del vecindario solucionaba cada problema que le iba surgiendo.
La ubicación escogida para el horno de leña fue la zona contigua a la barbacoa, aquí ya vemos la parte inferior construida. Esta base recogerá las brasas caídas del horno, ayudando a mntener la temperatura del horno constante.
La boca de entrada al interior del horno se reviste con los ladrillos caravista para luego forrar con piedra. Tras rellenar con arcilla, para evitar pérdidas de calor, se vierte el hormigón. La chimenea irá a ras de suelo, para verter las ascuas al hornillo.
Se unifica ambos módulos, la barbacoa y el horno de leña, con un adorno de ladrillo denominado sardinel, que se hace colocando los ladrillos como si fueran libros en una estantería. Además de ornamental, el sardinel es muy resistente.
Tras el terminó del horno, el usuario realiza el arco para la puerta.
Como te darás cuenta la encimera, ahora la comparten sin ningún problema el horno de leña y la barbacoa.
Esta fase más importante: colocadas las dos primeras hiladas, al nivel del piso dentro del horno, rellenamos con cristales rotos. Después el usuario explica que se debe cubrir con una capa de sal gorda, y así aseguramos de que el horno no pierda calor por el suelo.
Los ladrillos que rodena la base para el suelo del horno se colocan sobre la capa de sal gorda. El ‘pozo’ para verter las brasas, como vemos, queda perfectamente nivelado con los ladrillos, a ras de suelo.
Para cerrar el horno, El usuario ha cortado los ladrillos por la mitad, de esa manera resulta más fácil ejecutar trazados curvos.
El replanteo de la semiesfera es muy sencillo, basta clavar una puntilla en el centro del suelo del horno, anudar una cuerda y darle la medida deseada. Para este caso el horno resultó de 110 cm de diámetro, y 55 cm de radio. Llevando la cuerda tirante hasta los ladrillos, iremos dando la inclinación correcta a cada hilada, hasta que termine cerrando en la parte superior, justo encima de la puntilla.
Un secreto para hacer hornos está en dejar las dos o tres primeras hiladas sin inclinación, para lo que metamos en el horno no tropiece con las paredes, añade el usuario.
Para la chimenea del horno, se adaptó el tiro de un termo de agua caliente. Esta termo va dentro de un sólido tubo de cobre, ajustado entre los ladrillos.
De vez en cuenado revisa que el nivelado del los ladrillos sea en corecto,
Otro detalle está en como hacer que dentro del horno haya una buena iluminación, para ver cómo se hornea la comida. ¿Cómo conseguirlo? Aun que no lo creas con tan solo un cuenco de cristal Pyrex, que soporta altas temperaturas dejarás entrar la luz del día y dentro del horno no será tan obscuro.
El trabajo sigue a buen ritmo, y llega el momento de presentar la chimenea.
Aquí la cúpula tiene el primer enlucido con mortero refractario. Seguidamente, colocarás manta de vidrio como aislante, y luego alambre de gallinero para que agarre bien la segunda capa. Las puertas de hierro ya están colocadas.
La puerta inferior lleva por dentro esta rejilla destinada a sujetar una capa de mortero refractario. De esa manera, el calor no llegará a la chapa de la puerta, evitando el riesgo de quemaduras.
Un plástico protege debidamente el mortero de la lluvia y de la humedad nocturna. El horno de leña está casi acabado, y sólo falta una mano de pintura en el domo. ¿Qué les parece este proyecto para crear un verdadero rincón culinario de estilo rústico?
Fuente: cg.facilisimo