El tiempo pasa y muchas veces nos juega una mala pasada. Y es que se lleva la utilidad de nuestros muebles más preciados. Tenemos, por ejemplo, nuestros muebles de cocina que con el uso se van desajustando. Pero el secreto para no volver a nivelarlas es simple, sólo tendremos que regular las bisagras de cazoleta que las sujetan.
¿Quieres aprender con nosotros? Aquí te dejamos un fantástico paso a paso que te permitirá mantener tus muebles como nuevos.
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Aprende con nosotros PASO A PASO:
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- Cada herraje está dotado de varios tornillos, que permiten ajustar la puerta de diferentes maneras. Sólo necesitamos un destornillador.
- El primer tornillo, el más próximo al borde del mueble, nos permite regular la inclinación de la puerta. Simplemente giramos los tornillos de las dos bisagras, poco a poco, en el sentido adecuado en cada caso, hasta dejar el frente totalmente recto.
- La posición de la puerta también es ajustable en altura. Después de aflojar los dos tornillos centrales de cada bisagra, colocamos la puerta a la altura apropiada y los apretamos de nuevo, con la ayuda del destornillador.
- Asimismo, podemos regular la profundidad, es decir, el espacio entre la puerta y el mueble mediante el último tornillo de las bisagras. Si el frente sobresale del resto giramos los tornillos hacia la derecha.
- Por el contrario, cuando la puerta se encuentre hundida los apretamos hacia la izquierda.
- Siguiendo las indicaciones que os hemos dado, vosotros también podréis alinear las puertas de los armarios, tanto de cocina como de baño, obteniendo un óptimo resultado.
