La instalación del rodapiés o del zócalo es un aspecto a tener en cuenta a la hora de darle un buen acabado a una estancia. Además, cuando instalemos un suelo laminado es importante también que coloquemos el zócalo adecuado; así, conseguiremos un acabado perfecto.
Paso 1
En las tiendas de bricolaje encontraremos diferentes tipos de rodapiés, de manera que podremos escoger el modelo que mejor se adapte a nuestro suelo.
Paso 2
Tomamos bien las medidas de la pared, por tramos, y las transportamos a los zócalos.
Paso 3
A continuación, cortamos las diferentes piezas empleando una caja de ingletes y una sierra de costilla. Los cortes de los extremos de las piezas que irán junto al marco de la puerta, deberán ser rectos.
Paso 4
Los de los zócalos que se unirán en esquinas o ángulos, en cambio, irán en inglete, es decir, en ángulo de 45º.
Paso 5
En este caso, el rodapié cuenta con una ranura que sirve para ocultar los cables del teléfono o del ordenador.
Paso 6
Si no necesitamos los conductos para los cables, podemos pegar los rodapiés a la pared con un adhesivo de montaje. Aplicamos el producto en la parte posterior de las piezas.
Paso 7
De esta manera las colocamos en su posición, haciendo presión para que el adhesivo se impregne en la pared.
Paso 8
A continuación, las despegamos y esperamos a que el disolvente se evapore.
Paso 9
Transcurrido ese tiempo, fijamos definitivamente el rodapié.
Paso 10
Ahora sí que ya tenemos la habitación perfectamente equipada.