Y no, no es lava artificial o algun truco de cámara, se trata e un fenómeno puramente natural que ocurre en un volcán de Etiopía. El tinte azul que rodea la lava proviene de las llamas producidas por los gases sulfúricos, pero ¿cómo se documentó este evento geológico raro? pues la respuesta la tiene el fotógrafo francés Olivier Grunewald, especialista en esta clase de imágenes, toma sin utilizar filtros ni modificaciones de imagen y para conseguir la toma tuvo que esperar hasta el anochecer, cuando las llamas azules son visibles. Obviamente él trabaja con una máscara de gas para evitar respirar los humos tóxicos.
No es la primera vez que Grunewald viaja por el mundo para tomar imágenes de lava azul. En enero, viajó a Indonesia para fotografiar el volcán Kawah Ijen. El volcán es el tema de un nuevo documental producido por Grunewald y Régis Etienne, el presidente de la Sociedad de Vulcanología de Ginebra.